PIE DIABÉTICO

La diabetes puede dar lugar a la aparición de lesiones cutáneas y úlceras. Esto se debe a la
afectación de la enfermedad diabética sobre vasos, nervios y tejido epitelial. Por otra parte, son
pacientes que por su propia patología de base tienen un elevado riesgo de infección, provocando
complicaciones importantes generales o locales.
Según la severidad de la lesión, se clasifica en cinco grados:

• Grado 0: Hiperqueratosis (callos o durezas) o grietas.
• Grado 1: Úlcera superficial.
• Grado 2: úlcera profunda.
• Grado 3: Zona de celulitis, absceso, u osteomielitis, o signos de sepsis.
• Grado 4: Gangrena de un dedo / dedos del pie.
• Grado 5: Gangrena del pie.
Es fundamental trabajar sobre la prevención en la aparición de estas lesiones educando al paciente
a reconocer no solo los riesgos sino lo que es más importante, las medidas preventivas que el mismo
puede poner en práctica para evitar la aparición de estás lesiones que son difíciles
de curar y que con frecuencia tienen una gran facilidad para desarrollar complicaciones.

LA RETRONIQUIA

La retroniquia es un tipo de uña encarnada. Se trata de una inflamación del pliegue próxima de la
uña y lleva asociados cambios inflamatorios, infección y en ocasiones puede aparecer tejido de
granulación entre la uña y la carne.

La uña suele presentar una coloración amarillenta, puede incluso despegarse. En la zona de la
matriz de la uña, se produce una elevación respecto al borde de la uña y presenta una inflamación
crónica de los tejidos de alrededor de la matriz o nacimiento de la uña.
Las retroniquias son producidas por una interrupción del crecimiento de la uña por un traumatismo
único de alta intensidad o bien por traumatismos pequeños mantenidos en el tiempo.

Cuando la uña pierde la continuidad debido a estos traumatismos, se origina desde la matriz una
nueva uña y la antigua es desplazada hacia arriba y hacia atrás. Se produce una compactación entre
la uña antigua y la uña nueva, que produce la uña encarnada proximal, con la inflamación del tejido
de alrededor.

El tratamiento de esta patología consiste en una intervención quirúrgica con anestesia local para
realizar una avulsión de la lámina ungueal (sacar uña completa), o láminas que estén provocando
esta compactación que impide el crecimiento normal de la uña. No suele recidivar y los síntomas
de infección, dolor e inflamación, remiten rápidamente.